¿Qué hacer con una herida en colgajo?

La pregunta original era ¿qué hacer con una herida en SCALP dejar o recortar?

Hoy abordamos un tema que causa algunas confusiones: las heridas en colgajo, especialmente cuando se compara con las del SCALP. ¿Has escuchado alguna vez a alguien confundir ambos? No estás solo. Entremos en detalle.

¿Qué es exactamente una herida en colgajo?

Para empezar, es esencial comprender qué es una herida en colgajo y cómo difiere de las heridas SCALP.

SCALP se refiere a las capas del cuero cabelludo, y no tiene nada que ver con un colgajo de piel. Normalmente nos referimos a heridas en SCALP a heridas en colgajo que se producen en el cuero cabelludo.  Por otro lado, un colgajo es un trozo de piel que, debido a una lesión, se despega de los tejidos subyacentes pero sigue conectado en un extremo. Imagina un trozo de césped levantado en una esquina por un juguete o una herramienta.

Ante un colgajo: ¿Suturamos, cortamos o dejamos?

Suturar: Si el colgajo es viable y el tejido parece saludable, la sutura es la opción preferida. Esta intervención conserva el tejido y permite una mejor cicatrización. Por ejemplo, piensa en un corredor que tropieza y causa un colgajo en la rodilla. Si el tejido se ve rosado y vital, una sutura adecuada permitirá que se reintegre y cicatrice con normalidad.

Cortar: Hay momentos en que el colgajo, a pesar de estar parcialmente conectado, no es viable. Puede ser porque ha estado desprendido durante mucho tiempo o porque la lesión es extensa. Si se nota un tono pálido o azulado, es una señal de que la circulación no es óptima. En esos casos, eliminar ese segmento es la mejor opción.

Dejar como apósito: Existe una tercera opción que se considera en algunos casos. Si un colgajo no es completamente viable para suturar pero tiene un grado de vitalidad, se puede usar como apósito natural. Esta opción es útil, por ejemplo, en zonas donde es difícil suturar o en personas con determinadas condiciones médicas.

El “cómo” de cada técnica

Suturar: Siempre usando guantes estériles, limpia la herida con solución salina. Alinea el colgajo en su posición original y procede a suturar usando el material adecuado para la zona afectada. Normalmente, empezamos con un punto en esquina y luego continuamos por los laterales.

Cortar: Con tijeras quirúrgicas o bisturí, recorta el colgajo inviable cuidadosamente, siguiendo la línea natural del tejido. Luego, limpia y cubre la herida como lo harías con cualquier otra herida.

Dejar como apósito: Limpia la herida y alinea el colgajo tanto como sea posible. Aplica un apósito estéril y asegura que permanezca en su lugar, cambiándolo según sea necesario.

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¿Qué tienes que saber para la práctica?

• Las heridas en colgajo y SCALP son diferentes; no las confundas.
• Ante un colgajo:
  • Suturar si es viable y luce saludable.
  • Cortar si no muestra signos de vitalidad.
  • Dejar como apósito en situaciones especiales, utilizando el propio tejido como protección.
• Elige el tratamiento basándote en el aspecto y la vitalidad del colgajo.

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