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Fibrilación Auricular

¿Qué es una fibrilación auricular (FA)?

Es una taquiarritmia con activación eléctrica desorganizada a nivel auricular que genera pérdida de la contracción de las aurículas y estasis de la sangre en ellas, favoreciendo la aparición de trombos. Lo que conlleva aún riesgo de tromboembolismos e ictus. 

¿Qué tipos de FA existen?

Existen cuatro tipos de fibrilación auricular.

  1. FA paroxística, que es aquella cuya duración es inferior a los siete días y aparece y desaparece por sí misma.
  2. FA persistente, que es aquella que cuya duración es superior a siete días y precisa de fármacos o cardioversión para su resolución.
  3. FA permanente, que es aquella que no desaparece con la medicación ni con la cardioversión y precisa fármacos de forma habitual para restaurar el ritmo y anticoagulantes.
  4. FA idiopática, que es aquella en la que se desconoce su origen.

¿Cómo se diagnostica?

El diagnóstico de fibrilación se basa en los síntomas y se confirma con un electrocardiograma.  Se puede complementar con un Holter que permite el registro de la actividad eléctrica del corazón durante periodos más largos (24-48 horas) mientras el paciente realiza sus actividades diarias. Con la ecocardiografía nos permite examinar las válvulas del corazón y detectar posibles coágulos de sangre e incluso identificar enfermedades cardíacas que pueden provocar fibrilación auricular. También se puede completar el estudio con analíticas de sangre, pruebas de esfuerzo, coronariografía o con un estudio electrofisiológico.

¿Cuáles son las causas?

  • La edad, a partir de los 40 años el riesgo se incrementa.
  • Enfermedades cardiovasculares como un infarto de miocardio, valvulopatías o tener una insuficiencia cardíaca.
  • Otras enfermedades como la hipertensión arterial, la diabetes, enfermedades tiroideas, etc.
  • Consumo excesivo de alcohol y excitantes (cafeína, bebidas energéticas).
  • En el posoperatorio de cirugía cardiaca pueden darse algunas arritmias.

¿Qué síntomas tienen los pacientes?

  • Dolor torácico y palpitaciones.
  • Puede haber pérdida de conocimiento y/o síncope.
  • Disnea (dificultad para respirar).
  • Dificultad para hablar y debilidad, cuidado con los síntomas del ictus.

¿Cómo detectar una FA en un ECG?

Algunos puntos clave son:

  1. Frecuencia cardiaca que oscila entre 100 y 175 latidos por minuto.
  2. Los intervalos R-R son totalmente irregulares.
  3. Hay ausencias de ondas P, pueden verse unas ondas pequeñas e irregulares que se denominan ondas f.
  4. Los complejos QRS son de morfología similar a los del ritmo sinusal.

¿Cuál es el tratamiento?

El tratamiento se basa en principio en controlar la frecuencia cardiaca, y se suelen recetar betabloqueantes y digoxina. En algunos casos, también anticoagulantes por el alto riesgo de tromboembolismos e ictus.

Si con el tratamiento farmacológico no se frena la frecuencia se pueden optar por tratamientos más invasivos como son la ablación, que, a través de un catéter insertado en el corazón, se destruye el área específica de tejido donde se origina la FA, mediante radiofrecuencia, láser o corriente eléctrica. Los marcapasos también pueden ser una solución para el control de la frecuencia ventricular, ya que el nodo AV disminuye la cantidad de impulsos trasmitidos a los ventrículos, que produce una estimulación ventricular irregular.

Para resumir todo esto, tienes como siempre una infografía.

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