¿Cómo manejar la cicatrización de las heridas crónicas?

Las heridas crónicas pueden ser un verdadero desafío en el campo médico. A pesar de contar con diagnósticos y tratamientos adecuados, hasta un 20% de las úlceras pueden no mostrar una evolución favorable. Ahora, ¿alguna vez te has preguntado por qué ocurre esto?

¿Qué caracteriza a las heridas crónicas?

Cuando hablamos de heridas crónicas, nos referimos a aquellas que tienen un proceso de cicatrización donde la fase inflamatoria se prolonga anómalamente. ¿El culpable? El aumento de citoquinas proinflamatorias y de la actividad de las metaloproteasas, en particular la metaloproteasa 9 (MMP9). Esta enzima está directamente relacionada con la cronificación de una herida.

¿Qué ocurre en la fisiología de una herida crónica?

Este estado inflamatorio en las heridas crónicas implica una actividad proteolítica excesiva, lo que lleva a la destrucción de la matriz extracelular, estrés oxidativo, senescencia celular y disminución en la proliferación de fibroblastos y queratinocitos. En resumen, se crea un círculo vicioso que impide la cicatrización de la herida.

¿Cómo podemos romper este círculo vicioso?

Hay varios puntos clave a tener en cuenta para el manejo de heridas crónicas:

1. Control de las comorbilidades: el manejo de factores de riesgo cardiovascular puede ayudar a disminuir el ambiente proinflamatorio en las heridas.

2. Optimización del desbridamiento: adaptarlo a cada paciente es esencial. La eliminación de detritos y toxinas celulares reduce la inflamación en el lecho de la herida.

3. Acción antimetaloproteinasas: el propio desbridamiento y el uso de apósitos con esta función ayudan a reducir la concentración de enzimas proteolíticas.

4. Control de la infección: tratar la fase de colonización crítica e infección local con antisépticos no citotóxicos es fundamental.

5. Fisioterapia y rehabilitación: es fundamental el tratamiento del linfedema secundario y la realización de ejercicios para movilizar las articulaciones.

6. Abordaje interdisciplinar: la colaboración entre diferentes profesionales médicos es la clave del éxito.

¿Qué tienes que saber para la práctica?

• Las heridas crónicas se caracterizan por una fase inflamatoria prolongada causada por el aumento de citoquinas proinflamatorias y metaloproteasas.
• Es esencial romper el círculo vicioso que impide la cicatrización de las heridas.
• El manejo de heridas crónicas requiere control de comorbilidades, optimización del desbridamiento, acción antimetaloproteinasas, control de la infección y fisioterapia y rehabilitación.
• La colaboración interdisciplinar es clave para el éxito en el manejo de heridas crónicas.

 

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